Trabajar - Complejo Industrial. Santo Tirso, Oporto.

El edificio, que alberga la producción de componentes aeronáuticos, está compuesto por dos volúmenes aparentemente autónomos, de igual altura. El primero lo conforma una gran nave industrial, mientras que, en el segundo volumen, de tres plantas, se encuentra el área social y administrativa. La piel del alzado principal está compuesta por un panel prefabricado de hormigón que se adapta y homogeniza el conjunto.

Una serie de lamas formalmente ordenadas aportan rotundidad al proyecto. Este dinamismo se rompe con el juego de llenos y vacíos proyectado, creando además una enorme flexibilidad y variedad de luces que penetran en el edificio. El muro cortina de aluminio ayuda a formalizar el ritmo reticular de la fachada. Ya en el interior, destaca el vestíbulo diseñado a triple altura con una escalera suspendida que conecta los distintos pisos y explora la armonía entre el ritmo, la luz y el juego de escalas dentro del espacio.

La permeabilidad que se experimenta entre el exterior y el interior se produce a través del muro cortina GEODE, diseñado en base al mismo dibujo reticular que conforma la fachada de hormigón.