ESCUELA BANCAL, GIRONA

Investigar procesos de construcción industrializados para rebajar costes y acortar los plazos de ejecución era uno de los principales objetivos en la creación de este instituto-escuela con cabida para 690 alumnos de entre 3 y 16 años. Las múltiples necesidades tanto de espacio como de programa según el ciclo educativo además del gran desnivel del solar también han determinado enormemente la respuesta al proyecto planteado.

El sistema de terrazas ha sido el eje vertebrador en el esquema de fragmentación tanto del programa como del solar, resuelto a partir de la utilización de un solo elemento estructural industrializado de hormigón armado. Combinadas con las zonas opacas, destacan los huecos vidriados donde se han empleado ventanas Saphir y correderas y puertas de acceso Topaze.
Cada uno de los edificios configura su propio espacio exterior, su propia manera de relacionarse con el lugar y el clima, su particular recorte de sol y de cielo, ofreciendo a los usuarios múltiples ámbitos de aprendizaje y descanso a lo largo de las diferentes etapas de estudios.
El resultado, “un edificio con las ventajas de la construcción industrializada para configurar espacios capaces de acoger y acompañar la diversidad cambiante de los niños, con el deseo de seguir buscando sistemas amables de relacionar el hombre y el entorno”, tal y como describe el responsable del proyecto.


 Despacho de
 arquitectura:
 Bosch Capdeferro Arquitectures
 Industrial instalador
 Aluminier Technal:
 Falgarona SL
 Soluciones
 Technal empleadas:
ventanas y correderas SAPHIR y puertas de acceso TOPAZE